Muchas son las cosas que nos inspiran día tras día. En una ciudad como la nuestra, Barcelona, es muy sencillo impregnarse de esos momentos cotidianos que te hacen valorar hasta el más mínimo detalle. Su clima mediterraneo hace que nuestros locales sean un punto de encuentro durante todo el año. Una ciudad para vivirla, con su gente, su variada y mágica gastronomía, su arquitectura valorada a nivel mundial. Una ciudad de contrastes a la que le debemos nuestra identidad gastronómica.